Por: Freddy Minaya.
Gobierno dominicano da marcha atrás y derogará decreto que gravaba plataformas digitales
El Gobierno dominicano, a través del vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, anunció que será derogado el controvertido decreto 30-25, el cual disponía el cobro de impuestos a diversas plataformas digitales.
La noche del lunes miles de mensajes eran enviados a través del tráfico digital, incluso de hablaba de una gran convocatoria de usuarios de redes sociales, lo que asusto al gobierno.
La medida, que había generado gran rechazo entre ciudadanos y sectores empresariales, establecía la aplicación del Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS) a servicios de streaming como Netflix, Spotify y Disney+, así como a la publicidad en línea a través de Facebook Ads y Google Ads.
La noticia fue dada a conocer por el medio Diario Libre en sus redes sociales, destacando que la administración del presidente Luis Abinader decidió dar marcha atrás ante la reacción negativa de la población y los cuestionamientos sobre la viabilidad de la disposición.
Reacciones y críticas
Desde su anuncio, el decreto había generado un amplio debate, ya que implicaba un nuevo esquema de recaudación sobre plataformas extranjeras sin presencia física en el país. Expertos en materia tributaria señalaron la dificultad de aplicar dicho impuesto y su posible impacto en el acceso a servicios digitales.
Por su parte, sectores empresariales y publicistas advirtieron que la medida afectaría a pequeñas y medianas empresas que dependen de la publicidad digital para su crecimiento. Asimismo, usuarios expresaron su descontento en redes sociales, considerando que la carga impositiva afectaría directamente su acceso al entretenimiento y al comercio digital.
¿Qué sigue ahora?
Con la derogación del decreto, el Gobierno deberá replantear su estrategia de recaudación fiscal en el ámbito digital. No obstante, esta decisión demuestra la influencia de la opinión pública y el peso que tienen las redes sociales en la política fiscal del país.
Por ahora, los servicios digitales seguirán operando sin cambios en su estructura de costos para los consumidores dominicanos, mientras las autoridades evalúan nuevas formas de incrementar los ingresos fiscales sin afectar el bolsillo de los ciudadanos.